¿Te imaginas no poder acceder a la información de tu negocio?, ¿O que toda la información que tienes de tus clientes sea publicada a Internet de forma abierta?, ¿Estarías preparado para hacer frente a una amenaza de este tipo?.
Los despachos profesionales se han convertido en un objetivo preferente para los cibercriminales debido al tipo de información que manejan con datos especialmente sensibles, como por ejemplo, documentos de identificación personal, datos bancarios, etc.
Además, la mayoría de despachos profesionales son pymes en España, las cuales reciben el 70% de los ataques informáticos con un coste económico de 35.000 euros por incidente. Y 6 de cada 10 Pymes tienen que cerrar en los seis meses siguientes a recibir un ciberataque.
Son numerosos los riesgos a los que se enfrenta un despacho de profesionales:
- Ataques de ingeniería social, que no es otra cosa que manipular psicológicamente a las víctimas con objeto de que proporcionen la información que los cibercriminales necesitan para realizar los accesos ilegítimos a sus equipos.
- Fugas de información, que pueden producirse de forma intencionada o desintencionada por un miembro de la organización, o por medio de un ataque externo perpetrado por un atacante.
- Malware o “sofware malicioso”, que es cualquier programa o código con capacidad de dañar los sistemas informáticos.
Todos estos riesgos pueden tener consecuencias muy graves para la organización y es por ello es necesario llevar a cabo una serie de buenas practicas para proteger su información y los sistemas que lo gestionan:
- Conocer la situación y el riesgo de tu empresa a través una auditoría en ciberseguridad.
- Concienciar a todos los trabajadores en seguridad informática, es la principal acción para prevenir cualquier incidente de seguridad y la primera linea de defensa frente a un ciberataque.
- Gestionar la información en función de su criticidad ya que no toda la información debe tratarse de la misma forma. Además, realizar copias de seguridad periódicas.
- Utilizar contraseñas y métodos de autenticación robustos para acceder a los dispositivos. En caso de ser posible, activar el doble factor de autenticación y evitar usar la misma clave para acceder a distintos servicios.
- Utilizar herramientas de seguridad (antivirus y cortafuegos) en todos los dispositivos.
- Mantener siempre los sistemas y aplicaciones actualizados, corrigiendo de esta forma posibles fallos de seguridad o vulnerabilidades.
- Vigilar la actividad de tus dispositivos y revisar los informes periódicos de tus sistemas de seguridad para detectar posibles infecciones o ataques. Prestar especial atención a los correos electrónicos que contengan enlaces o archivos adjuntos, ya que es una de las principales fuentes de infección.
- Aplicar una política de gestión de incidentes y cumplir todas las leyes y medidas normativas en la empresa.
- Denunciar en caso de sufrir un ciberataque.
Apuesta por la ciberseguridad, cuida tu empresa y cuida de tus clientes.